Estabilización de la Tierra, Centro de Investigación Nuclear, Vietnam

Desafío

El Centro de Investigación Nuclear se encuentra en la cima de una montaña de pinos en las tierras altas del sur de Vietnam, en Da Lat, popular centro vacacional y destino turístico. Una nueva ala fue construida en la ladera este del sitio. Sin embargo, la empinada pendiente original (cubierta de árboles) estaba alterada, inestable y requería estabilización. La pendiente era de 2 a 6 metros de altura en un gradiente de 34 grados, lo que requería la estabilización de la tierra y el control de la erosión del suelo.

El Centro quería una solución que no sólo estabilizara las laderas e impidiera la erosión, sino que también proporcionara un paisaje verde, atractivo y ecológico alrededor de la instalación, que se integrara a la belleza natural de la zona y su cubierta forestal.

Solución Convencional

La solución de ingeniería convencional habría sido una pared de contención reforzada con hormigón. Esto habría sido una tarea costosa y prolongada, que habría incluido grandes trabajos de preparación del terreno y de encofrado. Tampoco habría sido una solución verde. También se consideraron soluciones de pared de contención segmentada, pero el transporte, el manejo mecánico y la logística incrementaban su costo.

Sistema de Confinamiento Celular de Geocelda de PRS-Neoloy

Las geoceldas PRS-Neoloy fueron capaces de proporcionar una solución de estabilización integrada. Esto incluyó una pared de contención reforzada para estabilizar la pendiente en la base y, a continuación, la protección de la pendiente en el 2/3 medio de la ladera para una solución muy económica.

El muro de contención constaba en su base de una profundidad de 4 celdas de geoceldas PRS-Neoloy Geocells 660-200 (altura). Estas fueron colocadas en filas en offset, que variaban en altura de 2-4 m según el contorno. No hubo necesidad de excavar unos cimientos profundos. Las dos filas externas de geoceldas de la fachada fueron rellenadas con relleno de piedra triturada, mientras que las otras dos filas fueron rellenadas con tierra local y compactadas.

Se utilizaron geoceldas PRS-Neoloy Geocells 445-120 (altura) para la protección de la pendiente. El sistema fue anclado en una cornisa de la cima de 1.5 m encima de un tejido geotextil, y tendido a lo largo de la prolongada pendiente con anclas distribuidas a una densidad de 1 m² para estabilizar las fuerzas de la pendiente descendente. El relleno fue grava con un ángulo de 28 grados de fricción interna para un control eficaz de la erosión. El relleno de grava estaba destinado a proteger la pendiente de la escorrentía.